Samantha Lotus, una «holistic master coach» e influencer canadiense, ha desatado polémica con un video en TikTok en el que afirma que no necesitamos gafas y que existen razones mentales, emocionales, físicas e incluso espirituales por las que no vemos claramente. Sin embargo, su principal motivación parece ser financiera, ya que vende un curso de 11 dólares que no ofrece ningún beneficio real.
La miopía es un problema de visión común en muchas partes del mundo, especialmente en Asia, donde el 90% de los adultos jóvenes la padecen. La causa de la miopía es el crecimiento excesivo de los globos oculares durante la etapa escolar, lo cual puede empeorar durante el crecimiento. Durante mucho tiempo se creyó que el exceso de estudio o mirar cosas de cerca contribuían a la miopía, pero actualmente se sabe que es principalmente causada por la falta de exposición al aire libre y a la luz solar.
Varios investigadores se han preguntado por qué tantos globos oculares crecen en exceso, y han llegado a la conclusión de que se debe a la falta de exposición a la luz solar, lo que causa un déficit de dopamina. Sin embargo, no se ha encontrado evidencia científica de que los ejercicios de entrenamiento visual tengan resultados a largo plazo en el tratamiento de la miopía.
Lamentablemente, la industria de la pseudociencia ha crecido en las últimas décadas, y los falsos tratamientos para enfermedades como el Alzheimer generan miles de millones de dólares. Es preocupante viralizar mensajes como el de Samantha Lotus, ya que pueden tener un impacto profundo en muchas personas y llevarlas a creer en ideas infundadas científicamente.
Es importante ser conscientes de que la miopía es una condición médica que requiere atención y cuidado profesionales. No existen atajos ni soluciones mágicas para mejorar la visión sin una base científica sólida. Debemos discernir entre información confiable respaldada por evidencia y mensajes engañosos que solo buscan aprovecharse de nuestras preocupaciones y deseos de una mejor visión. Mantengámonos informados y no caigamos en las trampas de aquellos que prometen soluciones milagrosas.
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