Los casos de sarampión en 2022 han experimentado un aumento significativo a nivel mundial, según ha informado la Organización Mundial de la Salud (OMS). En comparación con el año anterior, los casos de esta enfermedad han aumentado un 18%, alcanzando la alarmante cifra de nueve millones. Además, las muertes relacionadas con el sarampión han aumentado un 43%, llegando a 136.000 fallecimientos, en su mayoría niños.
Este aumento en los brotes de sarampión se ha producido en 37 países, en comparación con los 22 que experimentaron brotes importantes en 2021. La OMS advierte que una de cada tres personas con enfermedades raras carece de un diagnóstico definitivo, lo que dificulta aún más el tratamiento y el control de estas enfermedades.
La disminución de las tasas de vacunación en los últimos años se ha señalado como una de las principales causas de este incremento en los casos de sarampión. Aunque se ha experimentado un aumento en la cobertura de vacunación en 2022, aún hay 33 millones de niños en todo el mundo que no han recibido ninguna dosis de la vacuna. A nivel global, la tasa de cobertura de vacunación se sitúa en el 83%, pero en los países de bajos ingresos esta cifra disminuye considerablemente, alcanzando solo el 66%.
Los datos revelan que los 22 millones de niños que no recibieron su primera dosis de la vacuna contra el sarampión en 2022 se encuentran principalmente en Angola, Brasil, República Democrática del Congo, Etiopía, India, Indonesia, Madagascar, Nigeria, Pakistán y Filipinas. Esta falta de acceso a la vacuna en los países de bajos ingresos es una señal de alarma y refleja la necesidad de una mayor inversión en programas de inmunización.
La OMS enfatiza que todos los niños tienen derecho a estar protegidos por la vacuna contra el sarampión, sin importar dónde vivan. Es crucial aumentar la cobertura de vacunación en todo el mundo, especialmente en los países de bajos ingresos, para prevenir futuros brotes y reducir el número de muertes causadas por esta enfermedad prevenible.
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