Pedro Sánchez y Teresa Ribera, líderes del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y ministra de Transición Ecológica, respectivamente, han tomado la decisión de proteger el interés de las grandes compañías energéticas en España. Según informes, su preocupación radicaba en una posible fuga de capital hacia el extranjero.
Ante la amenaza de gigantes energéticos como Endesa y Repsol de trasladar sus inversiones a otros países, el Gobierno se ha visto obligado a revisar el impuesto a los ingresos de estas empresas. El miedo a una reacción en cadena ha llevado a Sánchez y Ribera a proponer una revisión total de este impuesto.
El Gobierno reconoce la importancia de estimular e incentivar las inversiones en energías renovables para cumplir con los compromisos medioambientales adquiridos con la Unión Europea. De hecho, el Plan Energético del Gobierno es uno de los más ambiciosos de Europa, con el objetivo de generar el 81% de la energía de fuentes renovables para el año 2030.
Sin embargo, tanto empresas como expertos han cuestionado la seguridad jurídica del país debido al impuesto sobre las ventas. Este impuesto desincentiva la inversión en España y ha generado preocupación en el sector.
Se espera que la revisión del impuesto se alinee con las directrices europeas, gravando los beneficios en lugar de los ingresos. Además, se especula que el ajuste podría incluir deducciones para las inversiones en energías renovables realizadas por las compañías.
En relación a este tema, Teresa Ribera ya ha admitido que el Gobierno buscará mantener un umbral razonable para el impuesto, teniendo en cuenta los cambios en el panorama energético global.
Según un informe de Bruselas, se espera que las compañías eléctricas y petroleras ya no se beneficien de ganancias extraordinarias a partir del año 2022.
En resumen, Pedro Sánchez y Teresa Ribera han tomado medidas para proteger el interés de las grandes energéticas en España, revisando el impuesto a los ingresos de estas empresas. El Gobierno reconoce la importancia de impulsar la inversión en energías renovables y se espera que la revisión del impuesto esté alineada con las directrices europeas.
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