El incendio en Hawái deja un saldo de 106 muertos y se prevé que aumente en los próximos días. Las autoridades han sido objeto de críticas por su manejo de esta tragedia, que ha sido el incendio más mortífero en Estados Unidos en más de un siglo. Hasta el momento, solo se ha explorado el 25% del área afectada, por lo que se espera encontrar más cuerpos a medida que los equipos de rescate avancen. La búsqueda se está llevando a cabo entre casas y automóviles reducidos a cenizas. Los rescatistas estiman que encontrarán entre 10 y 20 personas por día hasta que finalicen las labores.
Uno de los aspectos más impactantes del incendio se vivió en la ciudad costera de Lahaina, donde el fuego fue tan intenso que hizo fundir el metal. Esta situación ha dificultado la identificación de los cuerpos recuperados, por lo que las autoridades están solicitando a los familiares de las personas desaparecidas que se sometan a pruebas de ADN.
Como medida precautoria y en señal de respeto a los fallecidos, se está considerando limitar el acceso a Lahaina durante las operaciones de búsqueda. A pesar de estas medidas, las cifras de personas desaparecidas reportadas hasta el momento ascienden a 1.300, aunque se espera que disminuyan a medida que se restablecen las comunicaciones en la isla de Maui.
Tristemente, se ha confirmado la muerte de dos ciudadanos mexicanos en esta tragedia. El personal consular mexicano se encuentra brindando asistencia a las familias de las víctimas. Esta terrible situación ha conmocionado a la comunidad internacional y es un recordatorio de la importancia de tomar precauciones ante situaciones de emergencia y de contar con un manejo adecuado por parte de las autoridades. Sigue en desarrollo esta trágica historia en Hawái.
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