Digi y Vodafone España, dos grandes empresas de telecomunicaciones, presentaron recientemente sus resultados financieros con resultados completamente opuestos. Mientras Digi se ha convertido en el principal competidor del mercado español, robando clientes mes tras mes a sus competidores a través de la portabilidad, Vodafone España ha experimentado problemas y ha decidido abandonar España siendo adquirida por Zegona.
Digi ha logrado alcanzar una cifra récord de 6.1 millones de clientes en el mercado español, lo cual representa un aumento del 32%. Esto se debe principalmente a sus tarifas bajas y atractivas para los usuarios. Por otro lado, Vodafone España ha perdido casi 300,000 clientes de banda ancha fija en los últimos dos años, pero ha ganado cerca de 400,000 clientes de telefonía móvil gracias a sus marcas Lowi y Finetwork.
Interesantemente, Digi ha mostrado interés en adquirir los activos sobrantes de la fusión entre Orange y MásMóvil, lo cual podría fortalecer aún más su posición en el mercado español.
En cuanto a la adquisición de Vodafone España por parte de Zegona, se espera que esta compañía enfrente el desafío de recuperar la rentabilidad y el crecimiento de ingresos de la empresa. Durante el tercer trimestre, Digi registró ingresos por 166 millones de euros, lo cual representa un aumento del 29,9%. Por otro lado, Vodafone España tuvo ingresos de 965 millones de euros en su segundo trimestre fiscal, lo cual representa una disminución del 1,3%.
Además, Vodafone España ha reducido sus ingresos por servicios un 2,8% en el semestre, situándose como la peor división del grupo. Estos resultados no cumplieron con las expectativas, generando dudas acerca de la capacidad de la empresa para alcanzar las previsiones para el año.
Sin embargo, a pesar de sus problemas, Vodafone confirmó el pago de un dividendo interino de 4,50 chelines por acción, lo cual demuestra su compromiso con los accionistas.
En resumen, Digi y Vodafone España presentaron resultados opuestos en el mercado español. Mientras Digi se ha convertido en el principal competidor y ha experimentado un crecimiento significativo en el número de clientes, Vodafone España ha enfrentado dificultades y ha decidido ser adquirida por Zegona. Ambas compañías buscan mantener su posición en el competitivo mercado de las telecomunicaciones en España.
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