Puntos clave en el comunicado de prensa emitido por la Federación Española de Transporte Discrecional de Mercancías (FETRANSA):
La Federación Española de Transporte Discrecional de Mercancías (FETRANSA) ha expresado su preocupación por la falta de previsión por parte de los fabricantes y las autoridades en relación a la entrada en vigor del nuevo tacógrafo inteligente de segunda generación.
Como resultado de esta falta de previsión, los nuevos camiones no incorporan el tacógrafo adecuado y deben tener dos fechas de matriculación en la documentación, lo cual puede ocasionar confusiones y complicaciones a los transportistas.
Además, se ha informado que a partir de 2025, aquellos que realicen transporte internacional deberán cambiar el tacógrafo actual por el nuevo modelo. Esta situación genera preocupación entre los transportistas, quienes consideran que no es justo que tengan que asumir los costos de sustitución o adaptación del tacógrafo debido a la imprevisión de otros actores.
Otro punto destacado en el comunicado es la posible especulación o imprevisión en relación a la falta de suministros, como microchips, necesarios para la producción de los nuevos tacógrafos. Esta falta de suministros puede tener un impacto en el precio final de los dispositivos, lo cual afectaría aún más a los transportistas.
Ante esta situación, FETRANSA ha solicitado que los costos de cambios o adaptaciones en los tacógrafos sean asumidos por los fabricantes, quienes consideran que son los verdaderos responsables de la falta de previsión y de los problemas ocasionados a los transportistas.
En resumen, FETRANSA se muestra preocupada por la falta de previsión de los fabricantes y autoridades en relación a la entrada en vigor del nuevo tacógrafo inteligente de segunda generación. Los transportistas están siendo afectados por la falta de incorporación adecuada del nuevo dispositivo en los camiones y deberán asumir los costos de sustitución o adaptación. Además, la posible especulación en relación a la falta de suministros necesarios para la producción de los tacógrafos puede impactar aún más en los precios de dichos dispositivos. FETRANSA solicita que los fabricantes asuman la responsabilidad financiera de los cambios o adaptaciones necesarios en los tacógrafos.