Las afirmaciones falsas sobre la vacuna contra la covid que circulan en las redes sociales han sido desmentidas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Según estas publicaciones virales, los CDC habrían admitido que la vacuna reduce la vida en 24 años. Sin embargo, esto es completamente falso.
La información errónea se basa en un estudio realizado por la Cleveland Clinic de Ohio, no por los CDC. El objetivo de este estudio era evaluar la eficacia de la vacuna bivalente contra el coronavirus en la protección contra la infección del virus. No tenía como objetivo medir el impacto en la esperanza de vida.
Es importante destacar que no existen registros ni evidencias que respalden la afirmación de que las vacunas contra la covid reducen la vida. Esta información engañosa no se encuentra en la página web oficial de los CDC.
Otra afirmación falsa que circula en las redes sociales es que las personas que recibieron una nueva dosis de la vacuna tienen un 7% más de probabilidades de morir en 2022 que en 2021, supuestamente según los CDC. Sin embargo, los datos oficiales indican que la tasa de mortalidad ha disminuido en ese período.
Es importante destacar que las vacunas bivalentes contra la covid ya no están disponibles en Estados Unidos. En cambio, se recomienda el uso de las vacunas actualizadas para el año 2023-2024.
El estudio mencionado anteriormente no encontró que la vacuna bivalente fuera efectiva contra todos los linajes del virus. Por lo tanto, es importante tener en cuenta que la información debe ser actualizada y basarse en fuentes confiables.
Las fuentes utilizadas para desmentir estas afirmaciones falsas incluyen un preimpreso del estudio, la publicación del estudio en una revista científica, la página web oficial de los CDC, declaraciones de un especialista en la materia y datos oficiales de mortalidad.
Es esencial verificar cuidadosamente la información antes de compartirla en las redes sociales, especialmente en un momento en el que la desinformación puede tener consecuencias negativas para la salud pública.
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